Tras 20 días de intensidad deportiva, grandes emociones y una completa exhibición de habilidades deportivas, trabajo en equipo, unión, compañerismo, determinación y paz, Manizales, en el moderno Coliseo Mayor, bajó el telón -este jueves- de los I Juegos Nacionales Juveniles, sector olímpico y paralímpico, el evento multideportivo juvenil más importante del país y que se desarrolló en completo éxito en cada una de sus sedes y subsedes.

En total, 5625 atletas y Para atletas, de 32 delegaciones, reflejaron -en cada cancha, pista, estadio, piscina y escenario- el trabajo que, desde el Ministerio del Deporte, se realiza por la reserva deportiva del país, esa misma que será la encargada de ser protagonista del recambio generacional que le entregará alegrías a Colombia en próximos eventos nacionales e internacionales.

“¡El deporte colombiano le cumplió al país!”, con esta frase, que generó eco en los más de 3.500 asistentes a la ceremonia, la ministra del Deporte, Luz Cristina López Trejos, exaltó el talento, determinación y disciplina de cada uno de los deportistas que dieron vida a las justas juveniles. Así mismo, con un “gracias, gracias, gracias”, subrayó la ardua labor de la organización, que trabajó sin descanso para hacer posible este histórico certamen.

“Hoy cerramos, con nostalgia, pero con una gran satisfacción, la primera edición de los Juegos Nacionales Juveniles, en los que superamos retos, cumplimos metas y ratificamos las enormes capacidades de la juventud colombiana. Armenia, Pereira, Manizales, Cali, Bogotá, Calima-Darién, Buenaventura, Chinchiná y Nilo reciben hoy la medalla de oro, al ser los grandes anfitriones de un sueño que se hizo realidad”, manifestó la jefe de la Cartera.

Así mismo, destacó el hecho, sin precedentes, de que un mismo evento multideportivo en Colombia integrara deportistas de los sectores olímpico y paralímpico. “Quisimos ponderar, por encima de cualquier otra consideración, el verdadero concepto de la equidad en las oportunidades, en la visibilización y en la calidad de los servicios para todos los deportistas y todas las delegaciones. Esto fue histórico y hermoso; felicitaciones a toda la organización por haber logrado sacar adelante el reto más grande que teníamos”.

Acto seguido, la ministra del Deporte entregó a los gobernadores de Córdoba, Erasmo Zuleta Bechara; y Sucre, Lucy García Montes, la bandera de Colombia, como anfitriones de los próximos Juegos Nacionales y Paranacionales, así como los II Juegos Nacionales Juveniles.

Por su parte, el alcalde de Manizales, Jorge Rojas Giraldo, destacó el apoyo y compromiso del Ministerio del Deporte, cuya inversión ascendió a más de 89 mil millones, para que los Juegos llegaran a buen puerto. “Nuestra ciudad de las puertas abiertas es epicentro del deporte y hay que jugársela por él. Hoy, más que nunca, estamos listos para albergar cualquier evento deportivo nacional o internacional. ¡El Eje Cafetero demostró su capacidad de unión y fortaleza, somos orgullo de Colombia!”.

Cultura e identidad, sinónimos del Eje Cafetero

Los actos culturales y artísticos que engalanaron el acto de clausura estuvieron a cargo de la Orquesta Sinfónica de Manizales y Caldas, la Selección Manizales de Hip-Hop, la banda Danzalab de la Universidad de Caldas y la Coral Brahms, quienes pusieron a celebrar y festejar a los espectadores, en una clara muestra del poder transformador de la música y el deporte, como vehículos de unión y paz.

De esta manera, Manizales, Pereira y Armenia -como sedes- y Bogotá, Buenaventura, Cali, Calima El Darién, Chinchiná y Nilo -como subsedes- clausuraron los I Juegos Nacionales Juveniles y abrieron, desde ya, la puerta a la segunda edición, cuyos anfitriones serán los departamentos de Sucre y Córdoba.