El 19 de julio, Cali no será la misma. Porque cuando seis amigos y artistas se unen no solo para cantar, sino para contar anécdotas, compartir historias y hacer del escenario un refugio, lo que ocurre es algo más grande que un espectáculo. Es una experiencia transformadora. Y se llama V DE VINILO.

Después de agotar funciones en Bogotá y conmover a miles en todo el país, Karoll Márquez, Carlos Montaño, Alejandro González, Juan Manuel Medina, Juan Manuel Mendoza y David Palacio aterrizan en la Arena USC, en el corazón de una ciudad que vive la música como se vive el amor: con fuego, con alma, con entrega total.

V DE VINILO no es un show, es una declaración. La declaración de que la música también puede sanar. Que los hombres también lloran, ríen, se rompen y vuelven a empezar. Que la amistad, la vulnerabilidad y la pasión se pueden cantar a todo pulmón. Y que hay canciones que no se escriben con tinta, sino con vida.

Este espectáculo es una mezcla exquisita de teatro, música en vivo, confesiones, humor, baile y emoción desbordada. Una fiesta para los sentidos que recorre los sonidos que marcaron generaciones: salsa, cumbia, pop, merengue, rock y regional. Pero más allá del ritmo, lo que conmueve es lo que vibra debajo de cada letra: historias reales que nos recuerdan que todos estamos buscando lo mismo: ser escuchados, ser amados, ser libres.

Un viaje emocional

Y Cali, ciudad que respira arte en cada esquina y que hace de la música una religión, es el lugar perfecto para vivir este viaje emocional. Porque en la Sultana del Valle, la gente no asiste a conciertos. Se entrega a ellos. Se deja llevar. Siente cada acorde como si fuera suyo.

En la Arena USC, los asistentes no solo verán un show: vivirán una experiencia catártica, explosiva, íntima y colectiva a la vez. Bailarán como si nadie los mirara. Gritarán como si les fuera la vida en ello. Y quizás, saldrán con el alma un poco más ligera.

No se trata de un show cualquiera. Se trata de algo que te va a tocar por dentro, te va a sacudir por fuera y te va a recordar —como una buena canción— que estás vivo, que mereces sentir y que hay días que no se olvidan.

V DE VINILO llega a Cali. Y Cali, como siempre, está lista para dejarse llevar.