De acuerdo con los datos de la red de nueve estaciones de monitoreo de calidad del aire, históricamente la quema de pólvora afecta la calidad del aire en un porcentaje que puede superar hasta el 48 % los valores normales para tiempos de exposición de 24 horas y hasta 4 veces los valores promedio en un tiempo de exposición de 1 hora.
Cabe indicar que los componentes de la pólvora, entre ellos: el carbón, nitrato de potasio, bario y fósforo blanco, afectan el hígado principalmente, lo que según la Organización Mundial de la Salud puede originar en personas o pacientes vulnerables (personas con problemas respiratorios, cardiopatías o enfermedades de base): fallas hepáticas, neurológicas, alteraciones del potasio y alteran el transporte del oxígeno en la sangre.
Pocas horas después de la entrega del alumbrado móvil que disfrutaremos en esta Navidad, los caleños recibimos un regalo para la vida y nuestra salud. Y es que la lluvia que bañó la capital vallecaucana en la madrugada precipitó en pequeño porcentaje los contaminantes tóxicos y material particulado resultado de la quema de pólvora de la noche anterior.
Según el director del Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente (DAGMA), Carlos Eduardo Calderón, “afortunadamente este fenómeno natural, logró, confidencialmente, atenuar de manera transitoria los parámetros de material tóxico contaminante en aire que respiramos los caleños, pero si este comportamiento continúa seguramente tendrá efectos en la salud de la población”.
Actualmente todas las estaciones de monitoreo ubicadas en los barrios La Flora, San Pedro, El Obrero, Compartir, Cañaveralejo, El Poblado, Universidad del Valle, Base Aérea y el corregimiento de Pance, reportan índices de calidad de aire aceptables, lo que permite hacer actividad física de forma segura.
Sin embargo, se indica que debemos trabajar más en el fomento de la movilidad activa para bajar los índices contaminantes en el ambiente, tal como lo indica el Plan Integral de Gestión para la Mitigación de los Efectos del Cambio Climático, sancionado por el alcalde Jorge Iván Ospina, la semana anterior.
Cada año en Cali, además de las afectaciones por los altos niveles de ruido que generan traumas acústicos en humanos y animales de compañía, además de las afectaciones a la fauna silvestre entre ellas abortos, infartos, desorientación, abandono de crías y desplazamiento, la quema de pólvora deja una espesa capa gris con alto contenido de material particulado y gases como el azufre, altamente dañinos para la salud, producido por las detonaciones de pólvora.
El director Calderón Llantén invitó a la población a respetar la vida, a no quemar pólvora, cuidando nuestra salud física y ambiental.
La ciudadanía que desee conocer en tiempo real de los parámetros de calidad del aire en su sector, puede consultarlo en el geo portal:
