Tras la emergencia del pasado 9 de enero en el municipio de Rosas, Cauca, donde el derrumbe de una montaña afectó a más de 150 familias de las veredas Párraga Viejo, Santa Clara, La Soledad y Chontaduro, las familias damnificadas comenzaron a recibir ayudas humanitarias por parte de la empresa privada en coordinación con las autoridades.
A pesar del bloqueo en la vía Panamericana entre Popayán y Pasto debido a las toneladas de tierra y piedra que cayeron sobre la carretera, la empresa SuperGIROS y el Ejército lograron llegar hasta uno de los puntos del derrumbe en la vereda Párraga Viejo para entregar mercados, frazadas, ropa, medicamentos y alimento para mascotas, otras de las víctimas de la tragedia.
“Al menos la avalancha nos dio tregua. Logramos salir vivos, solo con la ropa que teníamos puesta, pero vivos, aunque no pudimos sacar nada de la casa. Espero que las empresas nos sigan colaborando, que no nos abandonen”, narró Clara Elisa Cruz de Bedoya, habitante del corregimiento de Santa Clara. El derrumbe también arrasó con más de 100 marranos y pollos de los que Clara y su familia subsistían económicamente.
Entre las primeras ayudas que entregó Super Giros estaban en total 130 mercados, 30 kilos de alimento para perros, 17 kilos de alimento para gatos, 100 frazadas y cobijas además de medicamentos y ropa.
Igualmente se llevaron cuatro tanques de almacenamiento de agua para garantizar el suministro a las comunidades afectadas por el derrumbe, además de 500 bolsas de agua potable por 5 litros.
“En cuanto nos enteramos del derrumbe, coordinamos la compra de las ayudas y la articulación con el Ejército porque somos una empresa generadora de bienestar, por eso nuestra prioridad es darles una mano a las comunidades damnificadas. Sabemos que además de sus viviendas, perdieron su sustento económico”, puntualizó Juan Felipe Gallego, Gerente General SuperGIROS Cauca, una compañía que seguirá brindando apoyo a las comunidades víctimas de esta tragedia.